A casi 10 meses de haber denunciado a su expareja, Nancy continúa exigiendo justicia y mayor seguridad, luego de que su agresor, Tomás “N”, quien fue vinculado a proceso por tentativa de feminicidio, hoy vive con arraigo domiciliario y radica muy cerca de su vivienda, bajo resguardo de una patrulla que permanece afuera de su domicilio.
La víctima relató que el 18 de enero de este año fue víctima de un intento de estrangulamiento por parte de Tomás Adahir “N” en la colonia Huilango 3000, frente a la casa de la madre del agresor. Este hecho quedó asentado en la carpeta de investigación 1002/2024, misma que posteriormente fue reclasificada como tentativa de feminicidio.
Semanas después, el 3 de febrero, Nancy volvió a ser agredida físicamente en la colonia Rafael Murillo Vidal, en el domicilio donde había vivido con él. En esa ocasión, Tomás, acompañado de otro sujeto, la golpeó y fue detenido en flagrancia por la Policía Ministerial, iniciándose una nueva carpeta, la 105/2025, por violencia familiar.
Tras diversas manifestaciones ciudadanas en febrero, donde familiares y colectivos exigieron la reclasificación del delito a tentativa de feminicidio, el 16 de marzo se ejecutó una orden de aprehensión contra Tomás Adahir “N” bajo la carpeta 1002/2024. Días después, el 21 de marzo, un juez lo vinculó a proceso y se le dictaron nueve meses de prisión preventiva en el penal de “La Toma”.
Sin embargo, el 17 de abril Nancy fue notificada para declarar por una nueva denuncia en su contra, presentada por la madre de su agresor por supuestas lesiones y amenazas, con número de carpeta 198/2025. La audiencia se programó para el 15 de mayo.
Ante este panorama, Nancy teme por su seguridad y solicita la misma protección policial que tiene su agresor. “Si a él lo resguarda una patrulla, yo también tengo derecho a sentirme protegida. No me siento segura, él sigue cerca de mi casa”, expresó.














